En alguna ocasión hemos comentado que no todo es oro lo que reluce. O dicho de otro modo, tengamos cuidado con lo que nos descargamos de Internet.

Las apps de mil y una tipologías y temáticas inundan nuestros smartphones. Y los ciberdelincuentes lo saben. Lo saben y no pierden el tiempo. Hece tiempo advertimos que una de la apps más descargadas del mundo, Whatsup, tenía ya sus “amigos” en forma de virus y otras variedades de malware.

Pues bien, querría hablaros de otro fenómeno de las Apps, Candy Crush, los famosos caramelitos. Más de 50 millones de descargas son un apetecible plato para los amantes de destrozar software ajeno. Existe ya circulando por Facebook, ni más ni menos, y como viene siendo habitual, un enlace que te ofrece “trucos” para Candy Crush. Si aceptamos la aplicación, nos redirecciona a algo que pretende ser la tienda de Google Play de Android y si seguimos con nuestras ansias de “trucos”, acabamos aceptando unas condiciones y usos, que jamás leemos, en las que nos han explicado que por cada sms que enviamos solicitando los “trucos” nos cobran! O sea, que de gratis nada, que de trucos nada y que de algo que parece una “estafa” todo. Pero bueno, ya veis, “estafa” entre comillas, para que no se enfaden los promotores de este y otros inventos similares, que pese a que consiguen que aceptes unas condiciones de uso en las que se advierte de que los servicios son de pago, no dudan en hacerlo de manera dudosa y que induce al error del usuario.

En definitiva, este es solo un ejemplo de los muchos que existen. Así que, cuidado con lo que nos descargamos!!