En diferentes ocasiones hemos hecho referencia al uso indiscriminado de las redes sociales para mostrarnos tal y como somos, tal y como pensamos, etc.

Ya hemos comentado pues, que todos los expertos en gestión de la reputación online recomiendan ser muy escrupulosos con lo que volcamos en la Red. Lo que compartimos, lo que comentamos, sobre los que opinamos, el tono en el que lo hacemos, si nos mostramos muy “alegres” al insultar o hablar mal de alguien.

Primero, por las consecuencias immediatas que ello pudiera tener. Por ejemplo, la red social puede “bannearnos” o incluso eliminar nuestro perfil.

Segundo, porque ya es sabido por todos,(lo hemos comentado en varias ocasiones) que son muchos los ojos que están alerta, y que pueden estar pendientes de lo que colgamos en la Red. Responsables del trabajo, empresas de RRHH, etc…

Tercero, porque nuestra reputación online puede verse seriamente perjudicada por un comentario desafortunado. Tenemos muchos ejemplos recientes de diferentes personas y redes sociales diversas.

Cuarto, porque lograr poder limpiar nuestra imagen en Internet no es fácil. El llamado derecho al olvido, se ha convertido en algo alcanzable, ahora sí, pero no fácil. Borrar nuestro paso por una red o por otra, resulta un tanto complicado. Y mientras lo intentamos, nuestros comentarios siguen allí…

En definitiva, no hace falta alardear de nada, no es preciso insultar a nadie(incluso a personajes públicos), tampoco es necesario exponer nuestras ideas más profundas respecto de algo y acabar “cagándose” en los que piensan diferente. No hace falta “retratarse” tanto, porque nunca sabemos cuando podría volverse en contra nuestra cualquier afirmación o comentario volcado en la Red. Hay otros foros más privados para hecerlo… La publicidad que nos hacemos es pésima.

Si buscas notoriedad, que sea por otros medios!