Ni será la primera vez, ni seguramente la última, pero dedicar unas líneas al cuidado que debemos prestar a nuestros perfiles sociales, nunca está de más.

Entre los headhunters y otras empresas de reclutamiento de personal, es ya una practica habitual el indagar entre todas las redes sociales, para poder adivinar o conocer algo de los candidatos. Somos curiosos, incluso cotillas. No lo podemos evitar, a veces… Pero no pensemos que los encargados de recursos humanos apartan esta curiosidad de sus métodos de trabajo. Dentro de estas prácticas, por otro lado, totalmente lícitas, es ya conocido el echo que si optamos a una posición para un puesto de trabajo, seremos fisgoneados por consultores de recursos humanos. Y es que, son muchos, los que se lo ponen realmente fácil.

Descuidamos que todo lo que volcamos en las redes sociales es ya público y accesible a prácticamente todos. Debemos tomar algunas precauciones si no queremos tener sorpresas desagradables. Por ejemplo, si en nuestro perfil de Facebook tenemos como imagn de perfil un logo que reza “antibanquero hasta la muerte!” y estamos optando a un puesto de cajero en una entidad bancaria… Los ejemplos podrían ser tantos…!!

Recordemos que no sabemos quién puede estar observándonos! No mostremos informaciones sensibles, datos personales no apropiados para el conocimiento público, fotos comprometidas, etc.

Quienes van a realizarnos una entrevista de trabajo, tienen más información a su disposición que el currículo que les hayamos proporcionado…y tal vez ni lo sabemos!!